•Capitulo nueve. – ¡Bitch!
Narra Justin.
Me fue imposible no
pedirle un abrazo, todos necesitamos ser abrazados alguna vez en la vida, así
que por mucho que te digan “No me abraces” sólo hazlo, porque realmente se
siente bien cuando lo hacen.
No me sentí bien al
decirle que yo estaba metido en mierda, prácticamente es como contar algo y
quedarte a medias, aun que realmente fue lo que pasó.
Ella no puede saber el
mundo en el que estoy metido, pensaría que soy la persona más horrible del
mundo y agh, maldita sea, dejaría de ser mi amiga, no quiero eso.
En cierta parte yo
también me doy asco a mí mismo, esto es sucio, en cualquier momento la puedo
cagar, pero lo hago por qué me gusta, me gustan las armas, siempre me han
llamado la atención, amo el peligro.
Cuando Ashley se entere
de lo que hago, sé que no le será para nada fácil, pero pienso en que me pueda
entender. Si lo hace entonces no habrán secretos entre nosotros, al menos por
mi parte. De todas formas, no le diré nada aún, no hasta que tengamos la misma
confianza de antes.
La llevé a su casa, esta
se despidió tierna, solo bajó del coche sonriendo y hizo una cara algo
chistosa, sin decir adiós se fue.
Narra Ashley.
Una mañana más, para ser
exactos un día más. Adormilada me levanto de la cama, como cada mañana camino
hacia el armario, allí busco algo de ropa, me cambio http://www.polyvore.com/dope/set?id=69528815 está algo nublado el día, así que no
creo que sobren las mangas. Dejo mi cabello suelto, después coloco el gorro.
Nanny toma
una taza de café caliente, lo sé porque continuamente hace muecas al mojar sus
labios en la taza. Sonrío al ver eso, ella me ve y también lo hace.
— ¿Qué hiciste anoche? —
Coloca un plato de ricos gofres en la mesa, pienso unos segundos antes de
contestar. No puedo decirle la verdad, ya que las carreras de coches son
ilegales y ella pensaría que Justin es un mal tipo.
— Hmm, fui por ahí con
Cara y Justin. — Frunzo el ceño esperando que se lo trague, así es, sonríe y
sigue bebiendo de su taza, yo agarro uno de esos gofres y empiezo a comerlo.
— ¿Y ahora a dónde vas? —
Ojea una de las revistas que hay por encima.
— Hmm, pues no lo sé. —
Encojo mis hombros. La verdad no había pensado a donde ir.
— ¿Qué tal si vas a la
casa de Justin? No sé si te lo comenté o no, pero hoy vamos a cenar en su casa,
Pattie insistió y bueno, ya sabes, sé que en los viejos tiempos solíais hacer
eso. — Sonríe, deja de mirar su revista para fijar su mirada en mí.
— Agh. — Soplo. — Está
bien que vayamos a cenar, pero no sé, será extraño ¿no crees? A demás ¿Por qué quieres que vaya a su casa
ahora? La cena es por la noche abuela. — Suspiro pesadamente.
— Vamos Ashley, así
podéis relacionaros un poco más. Sé que estás ultimas semanas no habéis
hablado… Además tienes que darle esto a Pattie. — Empieza a buscar entre los
bolsillos de su bata, cuando encuentra lo que buscaba lo saca y me lo entrega.
— Es la receta del pastel de manzana que tanto te gusta.
Ruedo los ojos, todo sea
por ese pastel. A parte, tampoco estoy tan mal con Justin ahora mismo, quizás
no sea tan malo pasar un poco más de tiempo con él. Descubrir más sobre él,
porque el realmente a cambiado y creo que no solo físicamente, también sus
gustos han cambiado, y bueno, si quiero que todo vuelva a ser como antes debo
poner remedio.
Salgo de casa, me dirijo
a la de Justin, cuando estoy frente a su puerta pico unas dos veces al timbre,
nadie abre.
Narra Justin.
Jane es toda una tigresa
en la cama, tanto que me deja exhausto, demasiado, sin ganas de moverme. Ella
solo queda envuelta en mis sabanas, también cansada. Sonrío de lado ante eso ya
que sinceramente me gusta que quede así más cuando yo soy el culpable.
El molesto timbre suena,
no sé quien coño es, pero se va a esperar por un largo rato a que yo decida
levantarme.
Como 5 minutos y aún
sigue tocando el maldito timbre. Ya cabreado pongo mis bóxers, pantalones y
salgo de la habitación, abro la puerta. ¿Qué es lo que me encuentro? Una Ashley
con el ceño fruncido, mirándome una cara un poco entre fastidio y sorpresa.
Frunzo el ceño, me apoyo
en el marco de la puerta, ella sin decir nada me entrega algo, al parecer un
papel, lo miro. Es una receta de un pastel de manzana, puedo recordar que es su
favorito.
— ¿Quieres que cocine o
algo así? — Arqueo una de mis cejas, intento no parecer enfadado aun que
realmente ha sido molesto por su parte venir y picar tantas veces. Normalmente
cuando alguien no contesta uno coge y se va, pero ella simplemente quedo ahí
tocando una y otra vez a la puerta aun que realmente ella no sabía que estaría
ocupado.
— Hmm, bueno, si te
empeñas en cocinar puedes hacerlo, pero he venido porque mi abuela me ha dicho
que tenía que darle la receta a tu madre. — Mira en otra dirección, intenta
mirarme, así que supongo que es porque estoy sin camiseta, no puedo evitar
reír.
— ¿A mi madre? Pero ella
nunca suele preparar tartas ni nada por el estilo. — Cruzo mis brazos, la miro
atentamente, ella sigue sin mirarme.
— Ah, es que al parecer
cenamos juntos esta noche. — Encoje sus hombros. — Sé que es un fastidio, pero
se empeñan en que cenemos juntos, esperan que sea como “antes” — Hace comillas
con sus dedos, la miro interrogante.
¿Cena? ¿Juntos? ¿Cómo
antes? Realmente estaba bien, es decir, para mí no era ningún tipo de fastidio
o algo así porqué realmente yo quiero eso, que vuelva a ser como antes. Me
molesta que para ella si lo sea, ¿Por qué entonces no quiere volver a ser lo
que éramos antes? Es decir, ¿buenos amigos?
— ¿Te molesta cenar
conmigo? — Rasco mi nuca esperando su respuesta, ella entreabre los labios,
siempre lo hace cuando piensa que decir, me he fijado.
— Eh… No, solo que será
incomodo. — Suelta ella, por fin, después de unos minutos logra mirarme, a los
ojos.
Narra Ashley.
No puedo ver a Justin sin
camiseta, me pone nerviosa, vale que sea mi amigo, o eso creo, pero dugh, ¿A
quien no le pone nerviosa un chico sin camiseta? Más cuando se trata de unos
buenos músculos.
Al decir lo último, pude
ver a una chica al fondo de las escaleras,
despeinada, con una camiseta de chico, supongo que de Justin ya que me
sonaba demasiado, esta no creo que lleve pantalones para nada, ya que estira su
camiseta hacia abajo constantemente, la miro interrogante, después a Justin. Él
suspira y gira rápidamente para ver que miro con tanta sorpresa aun que
seguramente ya lo esperaba, de lo contrario ese suspiro no hubiese sido tan
pesado.
— Te he dicho mil veces
que no bajes, y aún así haces lo que te da la gana. — Cruza sus brazos
mirándola con cara de fastidio, ella camina hacia nosotros, o mejor dicho él.
Rodea la cintura de Justin por detrás y apoya su cabeza en su hombro, queda
mirándome, con cara de… ¿Asco? — Ashley, ella es Jane, mi... — Queda pensativo
por unos segundos. — Novia. — La mira a ella, esta sonríe victoriosamente.
¿Su novia? Dugh, que
asco. Puedo entender porque ambos van así vestidos, y con esas caras/pelos,
apostaría lo que fuera porque estos dos acaban de tener relaciones. La chica es
bastante guapa, pero realmente a primera vista da a entender que es una
cualquiera, como yo suelo llamarlas, una zorra.
— Ashley, encantada. —
Sonrío, aun que sea falsamente, lo hago. Esta arquea una de sus cejas y sin
despegarse de Justin por fin dice algo.
— Bueno, Jane, su novia.
— Sonríe, está lo hace como restregando que ella es su novia, marcando el
territorio. Justin la mira de reojo como puede, después mira el suelo.
— Eh, si eso me ha
quedado bastante claro — Sonrío falsamente, de nuevo, y creo que ahora se da
cuenta, porque su cara cambia totalmente, me mira con asco.
— ¿Entre tú y Jus que
hay? … Digo.. ¿Cariño no te habrás follado algo así no? — Ríe. Una risa que me
da asco, nauseas, ¿Qué diablos está diciendo? Osea ahora no es que parezca una
perra, ahora lo confirmo, es una perra.
La miro con el doble de
asco que ella me ha mirado, después miro a Justin, este suspira pesadamente. No
sé cómo puede aguantar a alguien así. Aun que supongo que mientras le coman la
polla ya está contento.
— A ver Jane, tú eres la
única, no me la he follado ni me la pienso follar — Se separa de ella y la
mira, esta sonríe al escuchar sus palabras, lástima para ella porque aún no
había terminado. — porqué básicamente ella es mi amiga. — Me mira como
intentando darme a entender que no le haga caso, que su cabeza es hueca.
— Bueno, creo que me voy.
— Frunzo el ceño mientras doy media vuelta para volver por donde he venido.
— ¿Quieres irte? ¿No
quieres pasar? — Dice sin más.
— Eh… De hecho venia para
bueno, hablar, pero veo que estás ocupado — Hago una mueca. — Así que esta
noche ya nos vemos — Agito mi mano hacia un lado y hacia otro haciéndole
entender que me voy.

No hay comentarios:
Publicar un comentario